Tengo muy claro
que los seres humanos somos emocionalmente débiles y que hay que, uno, tenerlo en
cuenta, y dos, tomar precauciones.
Porque es
peligroso, puede llevar a la muerte por cosas tan terribles como la dejadez, la
inanición, el suicidio, el daño a los demás o el asesinato.
Cuando
atravesamos unos momentos de felicidad tenemos que ser conscientes de que son justamente
eso, momentos. La felicidad continua no existe, se llama de otra forma, ¿quizá estabilidad emocional?.
Pues eso, cuando
atravesamos momentos de felicidad y estos finalizan, nos podemos ver inmersos
en una caída emocional vertiginosa desde lo alto de una montaña rusa y sentir
una especie de vacío en el estómago y una sensación de profunda desdicha e infelicidad,
aunque no exista, aunque solo haya consistido en la vuelta a la normalidad.
Cuidado, tenemos
que ser conscientes y tener cuidado, es un espejismo tétrico e irreal, en
realidad lo más probable es que no haya pasado nada, solo la falta de felicidad,
como casi siempre.
Hay que joderse,
qué pena, qué débiles somos, ni la felicidad nos hace felices.
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