miércoles, 27 de abril de 2011

Arrugas


Hay gente con arrugas en la cara, arrugas bellas, arrugas que reflejan su vida, sus experiencias. Esa gente tiene una mirada clara, despierta, profunda, activa, que apoya su actitud, que es serena, amistosa, entre la seguridad y la duda, pero mucho más cerca de la primera.

Esa gente me gusta, me apetece hablar con ella, simplemente decirles "hola, ¿como estás?".

Es una alegría encontrarte con gente así, te eleva el ánimo.

Pero hay que mirar, no basta con ver.

Y me pregunto, ¿porqué hay gente que elimina esas arrugas de su cara? al eliminar esas arrugas, poco a poco, ¿no se irán borrando también de su alma? Esas arrugas invisibles y enriquecedoras que van cubriendo otras carencias que llegan con los años.

Esas personas ¿podrán seguir manteniendo esa mirada y esa actitud magníficas?, aunque la pregunta es ¿algún día las tuvieron?

Esto otro es una pena. Es un síntoma de que en esta sociedad hay algo que no va bien. 

martes, 26 de abril de 2011

Investigación X

Si, estuve.

Eran sobre las once de la mañana, había salido de casa como a las diez y media. Los vagones de metro circulaban casi vacíos y en las estaciones la espera se hacía eterna. Lo que habitualmente en días laborables son dos o tres minutos entre convoy y convoy, ese día se habían convertido en seis u ocho

En la calle el día lucía precioso y la temperatura, aunque un poco fresca a esa hora de la mañana, era un aliciente más para salir a caminar o simplemente a tomar el aire, disfrutar de ese aroma especial que tienen los días de fiesta, o en mi caso, para ir en busca de aventuras. Y vaya si las encontré.

Llegué al portal de Bruselas 4 sin un plan preestablecido para introducirme en el edificio, me encontraba bien, tranquilo, relajado, en la absoluta certeza de que nadie me podría descubrir. Me puse a echar un vistazo a la botonera del portero automático para elegir a qué vivienda iba a llamar. Descarté la consulta del Dr Donoso y, evidentemente, el 2º A. De repente sentí un 'clac' seguido de ruido, como el de un zumbido grave y fuerte. Era el resbalón de la puerta que había retrocedido y que dejaba mi paso hacia el interior del edificio a un solo empujón de una de sus hojas. El ruido del timbre cesó en un par de segundos, en cuanto empujé la puerta y pasé.

Seguí mi plan y subí por las escaleras hasta llegar al descansillo de la segunda planta donde elegí la puerta que daba al pasillo de acceso a la vivienda de la letra A. Allí estaba yo, con el ascensor a mi espalda y una puerta de aspecto robusto y elegante frente a mí.

Atornillado en la puerta, un poco por debajo del nivel de mi vista había un letrero metálico, dorado y bien pulido, en el que podía leerse en letras grandes y negras: EXPO ANGL. Solo, nada más.

Pero si, había algo más. Había algo grabado en la placa, en la parte inferior, con letras muy, muy pequeñas. Era casi imposible de leer, más aun con la poca luz que había, pero al pasar mi dedo índice por esa zona corroboré que sí,  había algo grabado.

Llevaba un rotulador verde en el bolsillo, le quité el caperuzón y froté su punta blanda sobre la zona donde al pasar el dedo había notado el relieve, eran unas pequeñas incisiones. Esos mínimos surcos se llenaron de tinta dando contraste a las letras sobre el dorado de la placa. Ya se veía claramente que se trataba de una inscripción. Aunque aun no podía leer nada.

Saqué mi teléfono móvil y lo apunté sobre la zona del grabado a la vez que acercaba mis ojos. Por fin, conseguí leer:

Eres especial, uno entre cien millones de seres humanos. Puedes y debes entrar. Pasa, todo está a tu disposición.

Y justo en ese momento, como si alguien hubiera estado observandome, la puerta se abrió sola. Con un "clic" parecido a cuando la secretaria del Dr Donoso me abrió la puerta de la consulta. Era el segundo resbalón que hoy retrocedía para darme paso.

Empecé a sentir los latidos de mi corazón, comenzaba a acelerarse. La verdad es que no sentía miedo, pero estaba absolutamente dominado por la emoción. Sentía algo parecido al vértigo.

Empujé la puerta hasta abrirla casi del todo. En primer término pude ver un pequeño distribuidor con dos puertas. Una a la derecha, cerrada, y otra de frente, abierta y por la que se distinguía algo de luz.

Me dirigí hacia esa puerta, la que estaba abierta, y la atravesé. Me encontré en una amplia salita de aproximadamente cuatro por seis metros. A la derecha había un pasillo y de frente unas cortinas que dejaban pasar algo de luz, algo del sol que brillaba en la calle. Me acerqué y con ambas manos las descorrí, lo que provocó que una tormenta de luz inundara la habitación, de golpe. Me di la vuelta mientras mis ojos se acostumbraban a ella. Los objetos de la salita se iban perfilando ante mi vista y de repente... la vi. Estaba sentada en un taburete con la parte superior del cuerpo derramada sobre una gran mesa redonda, o quizás ovalada, no se. Tenía los brazos doblados por los codos y separados a ambos lados de la cabeza, las manos abiertas con las palmas boca abajo sobre la mesa. Era ella, tenía que ser ella, con su cuerpo recto y su tronco corto, sin caderas, ni cintura, ninguna curva moldeaba su cuerpo y esos cabellos largos, pero no demasiado, duros, espesos, de color dorado, apelmazados y sin brillo que la tapaban la cabeza.

Me acerqué, no se movía. La dije ¡hola!, en un tono fuerte, casi gritando. Nada, no se movía, no reaccionaba ante mi voz. Me acerque aun más con mi brazo extendido hasta que, al intentar dar un suave toque en su hombro, mi mano se hundió en su cuerpo.

Sí, mi mano se hundió en su hombro, traspasando su carne y sus huesos como si de aire se tratara, bueno, en realidad lo que noté fue un líquido espeso, untuoso y fresco, algo que nunca había sentido.

Esperanza Aguirre y Zp

Bien por Esperanza, aunque tengo algún buen amigo que no la soporta, en este caso creo que ha acertado.

Me gustan estas actitudes, aunque sean "cara a la galería".

http://www.rtve.es/television/informativo-de-madrid/

Lista del PP a la Asamblea de Madrid

La presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata a la reelección, Esperanza Aguirre, ha presentado este lunes a los integrantes de su lista electoral y ha opinado que los ciudadanos "agradecen" que en ella no repitan los "imputados en el Gürtel", dadas sus "responsabilidades políticas". "Con el lógico respeto a la presunción de inocencia penal, creo que cuando un juez sospecha que un político ha utilizado su cargo para su proyecto personal existen responsabilidades políticas que hay que sustanciar y así lo hemos hecho en el PP de Madrid y esta lista es otra prueba de ello", ha defendido la presidenta. ...

No me gustan estas otras... esto va de mi parte, esta mañana me he acordado, no se porqué.

Zapatero, ¿para cuando lo de acabar con los paraísos fiscales?. Si mal no recuerdo fue una resolución del G20, en el que estuviste, hace ya muchos meses...

Podríamos empezar con Andorra y Gibraltar ¿no te parece?

Ya se que con Suiza no puedes tu sólo, pero podrías hablar algo de ello ¿no?

martes, 19 de abril de 2011

Investigacion IX

Así que, ... "EXPO ANGL".

Vaya, algo a lo que agarrarse, algo con lo que continuar. Entro en Google y escribo "ANGL", pocas pistas. Una empresa colombiana que se dedica a producir eventos como banquetes, fiestas, audiovisuales, etc... y una cadena de ropa en el área del sur de California "ANGL Clothing Stores". Bueno, no me rindo, ahora tecleo "EXPO ANGL" y... nada, absolutamente nada, como Google es muy listo me saca, así, por su cuenta, unos cuantos "expo angel", pero claro no es lo mismo. Por un momento me hace dudar, pero no, lo que estaba escrito era ANGL, no ANGEL, estoy absolutamente seguro.

Guía telefónica, me acuerdo que aun existe, Páginas Amarillas, bueno pues allá voy. Nada, no hay nada en Madrid con ese nombre.

Decepción. 

No me va a quedar más remedio que ir allí, al piso y enfrentarme a lo que sea, directamente, sin pistas previas.

Se me ocurre ¿y si voy un día festivo?, evidentemente no habrá nadie, por lo que no podré llamar al timbre y que me abran, pero bien es cierto que al no haber nadie tampoco podrá descubrirme. Así puedo hacer una incursión por la zona, explorarla.

En las guerras, cuando iba a haber una batalla, a los generales de los ejércitos creo que les gustaba visitar el lugar de la confrontación. Así podían ver los detalles, si había hierba, si estaba muy alta, si había muchas piedras, la vegetación, los árboles, los olores, en fin, identificarse con el lugar sobre el que iban a desarrollarse sus órdenes. Lo mismo ocurre con los equipos de futbol cuando van a jugar un partido muy importante fuera de casa, intentan entrenar, aunque sean sólo unos pocos minutos, en el lugar donde más tarde van a jugar, identificarse con el terreno de juego, el escenario.

Me parece una buena idea y decido que me voy a acercar el próximo viernes, que es fiesta.

Quiero hacer constar que esta mañana otra vez nos hemos encontrado. Yo bajaba las escaleras mecánicas de la estación de mi barrio y, en contra de lo que hago habitualmente, me he quedado parado uno de los escalones dejando que me llevaran. Delante de mí bajaba una chica andando y mientras lo hacía tapaba el objeto de mi investigación, cuando lo ha sobrepasado me he dado cuenta de que estaba allí, como yo, dejándose arrastrar. Al observar, de espaldas, su poco agradable figura, me he preguntado ¿Cómo es posible que alguien con un aspecto tan neutro y vulgar me haya llamado la atención hasta este punto? Gracias a mi inmovilidad he podido mantener la distancia y fijarme en sus formas, en su vestir, en su imagen desgarbada y anodina, tranquilamente, sin ser observado, aunque sea de espaldas, cierto que me he sentido un poco cobarde por ello.

El resto es la historia de casi siempre, excepto cuando contactó conmigo en el vagón. Hoy he salido yo antes. Mira que he subido despacio las escaleras, pues nada, cuando he llegado a las mecánicas del segundo tramo, he visto que se había retrasado y ahí estaba, al fondo, acababa de finalizar su tramo de mecánicas, caminando hacia mí al fondo del pasillo, estaba más lejos que yo de este segundo tramo. Me ha visto, estoy seguro, y ha escondido rápidamente la mirada hacia un lado, pero, de pronto, en una décima de segundo, ha debido cambiar de opinión y la ha vuelto de nuevo hacia mí, me ha mantenido la mirada y ¡ha sonreído!, juraría que me ha dedicado una sonrisa burlona, lo juraría... pero no puedo estar seguro porque he acelerado el paso para tomar primero el siguiente tramo de escaleras. Ahí ha acabado todo.

¿Es posible que todos los días nos encontremos por azar? 

El próximo viernes, preferiblemente por la mañana, estaré en la calle Bruselas, en el número cuatro, veré como consigo que me abran la puerta y subiré al segundo piso. Subiré por las escaleras y bajaré en el ascensor. Veré si hay azotea por si necesitara esconderme... en fin exploraré el escenario, su escenario.

jueves, 14 de abril de 2011

Viajar leyendo



Estoy leyendo un libro de Javier Reverte que se llama “El río de la luz”, no es el primero y seguro que no será el último. Me encanta. Disfruto. Cuando acabo de leer sus libros compraría un billete de avión y me iría corriendo a visitar los sitios que ha descrito.

Por favor, por favor, no confundáis a Javier Reverte con Arturo Pérez Reverte, sería un flaco favor para el primero.

Reconozco sus defectos, aunque no los voy a desvelar aquí, como no desvelaría los de un buen amigo ó amiga. Pero aun así “quiero” su forma de escribir, de describir, de involucrarse en lo que escribe, de su apasionamiento en lo que describe, de cómo me transmite sensaciones, sentimientos y hasta olores.

Esto es un pequeño párrafo del principio de este libro.

“Porque el Yukon me insufló torbellinos de luz en el alma, despertó en mi ánimo un nuevo anhelo de gozar de la existencia y me devolvió el optimismo que la malaria contraída en el Amazonas me había arrebatado y que a duras penas había logrado recuperar en una pequeña parte. Salté a la canoa del Yucon con la languidez y el decaimiento con que las secuelas del paludismo atenazaban mi espíritu. Y desembarqué trece días después pletórico de vida. Un río me había convertido en un pusilánime, y otro río, cuatro años más tarde, me devolvía la alegría de vivir.”

Esto es pasión ¿si ó no...?, que sea fingida no lo se, pero si lo es, lo disimula muy bien.

Quiero aclarar que sus libros de viajes son relatos de los que ha realizado, sólo, como, según él, se debe viajar. Sólo y casi sin equipaje.

Me encanta. Recomiendo la lectura estos libros de viaje y yo comenzaría por  su trilogía de Africa. En el orden cronológico en que escribió cada título.

Tiene también novelas, pero leí una y me decepcionó bastante.

Con el apasionamiento que me caracteriza os animo a que leáis algo de él.

miércoles, 13 de abril de 2011

Investigacion VIII

Son las 6.10 de la tarde y estoy enfrente de la puerta del Dr. Donoso con el dedo índice de la mano derecha a diez centímetros escasos del botón de llamada del timbre de la casa.

Hoy, al salir de trabajar me he dicho: se acabó, voy a acercarme para ver si compruebo donde trabaja.

Así que aquí me encuentro delante de la consulta del alergólogo esperando poder  avanzar en mi investigación y de paso, quizás también consiga, que se resuelvan mis problemas de rinitis alérgica, quien sabe...

Por fin hago sonar el timbre y la puerta se abre.

- Buenas tardes, pase.

Una voz femenina sale de dentro de una bata blanca de donde salen también dos piernas, dos brazos y una cabeza con rubios cabellos.

-Siéntese.

Me tomo la orden como una sugerencia y me siento en un sillón a la vez que doy las buenas tardes a una pareja joven y a una anciana que están esperando en la consulta.

La recepcionista se ha sentado para descolgar el teléfono que sonaba insistentemente.

Dudo durante unos instantes si ponerme los auriculares del mp3, pero decido que mejor no lo hago para poder oír cuando me llamen para pasar a la consulta.

La chica de recepción habla alto y tiene una voz aguda lo que me hace pensar que es imposible que alguien que hable con ella guarde algún secreto. Ahora mismo está hablando con alguien al que dice a grito pelado:

- ya puede venir cuando quiera a que le vacunen

- si, ya no hay problema, ayer lunes lo arreglaron, han sido más de dos semanas sin ascensor…

¡Cáspita!, o sea, que el ascensor estaba estropeado... o sea, que no es que subiera las escaleras andando porque fuera al primer piso...
¡Puede que se dirigiera a cualquier otro piso de la casa!

Pego un salto del sillón, me dirijo hacia la puerta y me voy sin despedirme. Tendré que esperar a otro momento para que alguien me solucione mi rinitis.

Todo se me ha venido abajo, otra vez tengo que empezar, otra vez tengo que  esperar a que coincidamos una mañana y seguir sus pasos sigilosamente hasta el portal, ¿y luego? Esta vez me descubre. ¿O quizás ya me ha descubierto? Porque yo creo que se huele algo... el contacto del otro día en el vagón del metro creo que no fue fortuito...

La sed que tengo me lleva a la cafetería que hay a la vuelta de la esquina, antes de llegar a la boca del Metro. Un lugar agradable y tranquilo por cuya puerta paso todos los días, dos veces, y en el que entro por primera vez.

Hay una barra a la izquierda y mesas a la derecha. Huele a sandwich a la plancha, o sea, a margarina derretida por el calor. Odio ese olor. Casi al fondo, allí está, con su aspecto anodino y vulgar, tomando un café. Creo que no me ha visto. En unas décimas de segundo decido dirigirme hacia allí, a su lado. Casi rozo mi codo con su brazo, mi corazón palpita más fuerte. Me ha costado, ha sido un esfuerzo emocional, he entrado en su zona vital y tiene que haberse dado cuenta, es imposible lo contrario. Pido un cortado aunque sea lo único que me falte para ponerme como una pila, aunque realmente ya estoy así, como una pila de 12 voltios. Pensar eso me tranquiliza. De repente se mueve, se va, se aleja de la barra, veo como se dirige hacia una puerta que hay al fondo y que tiene un rotulo en la parte de arriba en el que se lee "ASEOS". Abre la puerta y desaparece de mi vista. Encima de la barra de la cafetería hay un montón de sobres al lado de la taza del café que se está tomando. No veo lo que está escrito en ellos. Me tengo que acercar y cuanto antes lo haga mejor, pues no tardará mucho en salir. Hago un esfuerzo mental y me acerco, sin disimular, que es la mejor forma de no dar el cante. En el primer sobre está escrito: "EXPO ANGL" C/ Bruselas, 4 - 2ºA Madrid. Ya está. Todo yo se relaja.

Vuelve a la barra, su brazo y mi brazo se tocan. Se toma de un trago lo poco que queda en la taza. Se dirige hacia la puerta de la calle, pero antes ha dicho un "adiós" que siento que se me clava, pues diría que va dirigido a mi, ¿o no?. Sinceramente, a pesar de lo anodino de su voz, me estremezco.

Después de tomarme el café, salgo a la calle y pienso que he avanzado mucho. Tendré que pensar cual va a ser mi siguiente paso.     

Por favor


Por favor, si podéis disponer de 1,50 euros a la semana, comprad un periódico, que muy posiblemente podréis leer durante varios días.

Pero, por favor, no leáis ningún periódico gratuito de los que dan a la entrada del metro o en la cola del autobús, o en cualquier otro sitio.

Estos periódicos contaminan nuestra mente y nuestro espíritu. Puedes preguntarte ¿porqué son gratuitos? y no te creas eso de que la publicidad los paga, no solo los paga la publicidad...

Si no dispones de 1,50 euros a la semana, haz otra cosa. Por ejemplo pensar.

Piensa porqué no puedes disponer de 1,50 euros a la semana para comprar un periódico.

Piensa lo bonito que es mirar a la cara a la gente en el metro y el autobús a la vez que les regalas una sonrisa.

Piensa qué puedes hacer para ser un poco más feliz ó para hacer un poco más felices a las personas que quieres.

Piensa qué vas a hacer el próximo fin de semana para que no sea tan frustrante como lo fue alguno hace poco.

Piensa en lo bonito que es un día de sol en primavera.

Y si no puedes pensar ó no te encuentras bien pensando ó si el pensar no te reconforta, piensa porqué te sucede eso.

Si finalmente es imposible y no quieres pensar, siempre te queda el recurso de ir a una Biblioteca Municipal y coger un libro.


Pero no dejes que te manipulen.

Por favor.


Puntualización. No es que piense que los periodicos de pago no manipulan, desgraciadamente todos los medios de comunicación españoles que conozco manipulan, lo que sucede es que en el caso de los periodicos gratuitos es escandaloso.

Otra puntualización: Para ser justo he de decir que, en mi opinión, ahora mismo, el medio de comunicación menos manipulador en España es RTVE y eso se lo debemos a Zapatero aunque muchas veces me cabree, me cabree y me cabree (mc, mc y mc). En fin...

martes, 12 de abril de 2011

ATTAC


ATTAC significa Asociación por la Tasación de las Transacciones (financieras) y por la Ayuda a los Ciudadanos.

Me gustaría que ATTAC fuera el movimiento ciudadano que sirviera de base para un futuro más justo para los seres humanos.

Que fuera un motor importante que colaborase en sacar a nuestra sociedad del atolladero en que se encuentra, en el que sólo se vislumbra un futuro de mecanización moral, conformismo y esclavitud.

Que acabe con esa bipolaridad trasnochada de izquierdas y derechas, inexistente en estos momentos, para convertirse en una oposición frontal y global a la dictadura imperante de los mercados financieros que están apoyados por las políticas económicas neoliberales de la inmensa mayoría de los gobiernos de los países del primer mundo.

Hay que darles una oportunidad, hay que apoyarles, hay que colaborar, hay que reaccionar ante esta falta de futuro ilusionante que nuestro mundo necesita.

Enlaces:

http://es.wikipedia.org/wiki/Attac

http://www.attac.es/

http://www.attacmadrid.org/

jueves, 7 de abril de 2011

Querido Portugal, queridos portugueses


Yo si.

Me solidarizo con Portugal, joé cómo cuesta pronunciarlo, ¿será por eso por lo que se utiliza tan poco? podríamos cambiar la palabra y utilizar una nueva, por ejemplo "solidad", "me solizo con Portugal". No estaría mal ¿no?

Y ¿qué puedo hacer para solidarizarme con los portugueses?, pues, de momento, escribir esto para denunciar algo que parece que sólo yo veo.

Es como si el resto de Europa, de los países ricos de la zona euro, desearan que sucediera lo que ha pasado. Esta es mi denuncia.

¿Porqué asevero algo tan fuerte?

Porque, ¿no hubiera sido más fácil apoyarles antes de la caída? No dejarles caer, evitar que Portugal llegara a la situación actual. ¡Eso si hubiera sido solidaridad!

Porque, los países ricos de la zona euro, ¿no hubieran podido tomar medidas políticas, e incluso económicas, para evitar que las aves de rapiña, léase grupos económicos perversos, se cebaran en unos cuantos millones de personas, de ciudadanos portugueses?

Porque, estas aves de rapiña están siendo favorecidas por las políticas neoliberales que justamente esos países ricos de la zona euro, encabezados por Alemania, están imponiendo en Europa.

Porque ahora si, van a "salvar Portugal", prestándoles el dinero que necesitan, que no les han ofrecido desinteresadamente antes, para imponerles unas condiciones que esos países desean y que van a hacer sufrir a muchos millones de portugueses.

Esta Europa insolidaria es una mierda y así es preferible estar fuera.

¡Prefiero jugar la Copa America!, a la que quizás tambien podrían apuntarse nuestros amigos portugueses. A la mierda la Europa insolidaria.

miércoles, 6 de abril de 2011

La Solidaridad.



Se da o se toma. Yo prefiero darla, porque sólo se toma cuando se necesita y para ello es necesario que alguien te la ofrezca. Y si la necesitas es que algo va mal, aunque lo más probable es vaya muy mal, realmente mal.

Debería haber bancos de solidaridad en los que se llevara un estricto control de los donantes. Si has sido donante podrías tener acceso a la de otros. Pero si no has sido donante te concederían un préstamo con la única condición de que la devolvieras en cualquier momento, cuando la necesite otro. Los reiteradamente morosos no podrían volver a obtenerla nunca, tendrían cerrada la puerta de este banco.

Significa el apoyo de quienes tienen algo a los que no lo tienen. Puede compararse con el concepto de las "economías de escala". Lo que unos pocos no pueden hacer porque no es rentable, un grupo suficientemente grande si puede hacerlo. El grupo acoge a la minoría para hacer "masa critica" y ayudarla.

Es lo que ejercitaban los movimientos estudiantiles y universitarios de los años 60 y 70 del siglo pasado, esos movimientos que cambiaron el mundo que llamamos occidental, que hicieron de él un lugar grato en el que vivir, que condujeron a la sociedad en la que vivían hacia el bienestar, creando la "sociedad del bienestar", que ahora se está viniendo abajo, entre otras cosas, por la falta de lo que movió a estos jóvenes catalizadores sociales, la solidaridad.

Es necesario hacer publicidad de ella, que la gente la conozca, que los que la han conocido alguna vez la recuerden.

Hay que hablar de SOLIDARIDAD y la mejor forma de hacerlo es ejerciéndola, proporcionándola a quien la necesite y en paralelo recordando al mundo que todos podemos necesitarla en algún momento.

viernes, 1 de abril de 2011

Contacto VII

 Llevamos tres días, tres mañanas, viajando juntos. Vagón línea 10, transbordo, vagón línea 7, hall de salida. Luego en la esquina nos separamos. Unas veces salgo antes yo, otras no.

Es más, hoy estaba como esperando a alguien en la calle, en nuestra boca de Metro, la de nuestra casa, yo creo que era una pose. Por supuesto me ha visto.

He entrado y me he parado en el hall de entrada para comprar un metro-bus en la máquina expendedora. He tardado un rato porque, no se porqué, me he equivocado al marcar el número secreto, sí, eso que los que viven al norte de México maman PIN. 

Cuando he llegado al andén acababa de llegar un convoy y me he subido en él, no en la puerta habitual, sino en la primera que he visto al bajar las escaleras. Luego he ido caminando por el vagón para posicionarme en la zona en la que suelo ir, el tren ya estaba en marcha y cuando estaba atravesando una de las zonas de torsión, posiblemente provocado por una curva no tomada a una velocidad conveniente -siempre digo que los conductores del metro deberían entender que no transportan ganado-, hemos chocado, de frente.

- Disculpe.

- Lo siento.

He oído su voz, no muy agradable por cierto, más bien neutra, tampoco horrible. Y he percibido su olor, inodoro, no utiliza colonia, no huele bien ni mal. Tan gris como aparenta.

Emoción, eso es lo que he sentido.

Yo creo que me esperaba, lo que no se es si el contacto ha sido provocado o fortuito, pero...

Por supuesto hemos ido juntos hasta nuestra separación habitual, yo he salido después y he visto como se perdía bajando por la calle Bruselas.